El síndrome de intestino irritable tiene relación con la ansiedad y la depresión

Hay algo no se conoce mucho y es que gran cantidad de personas con SII experimentan síntomas emocionales y trastornos del estado de ánimo, como ansiedad y depresión.

Hoy vengo a hablarte de la relación del SII con estos trastornos, qué causas puede haber, cuáles son los factores de riesgo, qué consecuencias conlleva y cómo puedes prevenir y reducir este desequilibrio en el eje intestino-cerebro.

Relación del SII y la ansiedad y depresión en cifras

Diversos estudios sugieren que existe relación entre el SII y los trastornos del ánimo. Se estima que entre el 40% y el 60% de las personas con SII también experimentan ansiedad y/o depresión. 

Es importante recalcar que las estadísticas son datos que deben interpretarse dentro de un contexto y por ello pueden variar según la población, la región y otros factores.

Qué son el SII, la ansiedad y la depresión

Síndrome de intestino irritable o colon irritable

El síndrome de intestino irritable (SII) es una afección gastrointestinal común que se caracteriza por dolor abdominal, distensión y alteraciones en la función intestinal. Se calcula que afecta a entre el 10% y el 15% de la población general, y es más común en mujeres que en hombres.

Ansiedad

La ansiedad es un trastorno emocional que se caracteriza por una sensación de inquietud o preocupación excesiva, acompañada por síntomas físicos como pueden ser la sudoración excesiva, el aumento en las palpitaciones o los temblores. 

Depresión

Por su parte, la depresión se define como una alteración del estado de ánimo que se manifiesta con tristeza, desánimo, falta de energía y pérdida de interés por las actividades cotidianas.

¿Por qué se produce esta relación entre SII, ansiedad y depresión?

Aunque se desconoce la causa exacta de esta relación, se han propuesto varias teorías.

1. Una de ellas es que los síntomas gastrointestinales del SII pueden causar estrés emocional, lo que a su vez contribuye  al desarrollo de ansiedad y depresión. 
2. Otra teoría es que el SII y los trastornos del ánimo comparten factores de riesgo comunes, como el estrés crónico, la alteración de la microbiota intestinal o la inflamación.
3. Algunos estudios han demostrado que el SII puede alterar la comunicación entre el cerebro y el intestino, lo que se conoce como eje intestino-cerebro. Esta alteración aumenta la sensibilidad intestinal y provoca síntomas como dolor abdominal, lo que a su vez puede afectar negativamente el estado de ánimo.

Síntomas 

Esta relación SII con trastornos del estado anímico, puede provocar diferentes síntomas y efectos en la salud de las personas. Te muestro algunos de ellos:

• Las personas que la padecen pueden tener síntomas gastrointestinales más intensos o más frecuentes, lo que empeora su calidad de vida.
• La ansiedad y la depresión causan, a menudo, insomnio o dificultades para conciliar el sueño, lo que a su vez afecta a la salud intestinal y aumenta los síntomas del SII.
• Tanto el SII como los trastornos del ánimo provocan fatiga y agotamiento, lo que es un obstáculo y les impide realizar sus actividades cotidianas.
• Algunas personas con ansiedad también experimentan síntomas como dolor abdominal, náuseas o diarrea, que se confunden con los síntomas del SII.
• Se ha observado que las personas con SII y trastornos del ánimo tienen un mayor riesgo de desarrollar otros trastornos, como el trastorno de ansiedad generalizada o el trastorno depresivo mayor.

Es importante tener en cuenta que cada persona puede experimentar diferentes síntomas o efectos en función de su situación individual (contexto, hábitos, genética, etc.).

Efectos en la salud y el bienestar

Alguno efectos nocivos en la salud y bienestar en el medio y largo plazo observados, son:

• Notable reducción en la calidad de vida, ya que tienen  dificultades para realizar sus actividades cotidianas y disfrutar de su tiempo libre.
• Mayor riesgo de desarrollar enfermedades crónicas como la diabetes, enfermedades cardiovasculares o enfermedades autoinmunitarias.
• La ansiedad y la depresión pueden provocar aislamiento social, lo que puede afectar la salud mental y aumentar la sensación de soledad y aislamiento en personas con SII.

Es importante tener en cuenta que tratar cuanto antes los síntomas del SII y los trastornos del ánimo puede ayudar a reducir el impacto negativo a medio plazo en la salud y bienestar de las personas afectadas. 

Factores de riesgo

Existen diversos factores de riesgo que pueden contribuir a esta relación. Aquí te presento algunos de los más comunes:

• El estrés puede desencadenar o empeorar los síntomas del SII, y también puede contribuir al desarrollo de trastornos del ánimo como la ansiedad y la depresión.
• Los antecedentes. Las personas que han experimentado trastornos del ánimo en el pasado tienen un mayor riesgo de desarrollar SII y viceversa.
• Se ha observado que las mujeres tienen un mayor riesgo de desarrollar SII y trastornos del ánimo, y se cree que esto se debe en parte a los cambios hormonales que experimentan durante su ciclo menstrual.
• Ciertos alimentos, como los alimentos ricos en grasas, pueden desencadenar los síntomas del SII y contribuir a la aparición de trastornos del ánimo.
• Se ha observado que las personas con SII y trastornos del ánimo tienen alteraciones en la composición de su microbiota intestinal, lo que puede contribuir a la aparición de ambos trastornos.
• Las personas que han sufrido abuso emocional o físico en el pasado tienen un mayor riesgo de desarrollar SII y trastornos del ánimo.

Es importante tener en cuenta que estos factores de riesgo no garantizan que una persona desarrollará SII o trastornos del ánimo, y que cada caso es único y requiere una evaluación individualizada. 

Diagnóstico y tratamiento integrativo 

Hablemos de los abordajes actuales para esta problemática que padecen demasiadas personas en la actualidad.

Pruebas diagnósticas

En general, no existe una prueba diagnóstica única para detectar la relación entre el síndrome de intestino irritable (SII), o colon irritable, y los trastornos del ánimo como la ansiedad y la depresión. El diagnóstico se basa en una evaluación cuidadosa de los síntomas y la historia clínica de la persona.

Sin embargo, existen algunas pruebas y estudios que pueden ser útiles para descartar otras afecciones que puedan estar causando los síntomas y para evaluar la gravedad del SII y su impacto en la calidad de vida del paciente. 

Estas pruebas pueden incluir:

• Análisis de sangre y heces para descartar infecciones, inflamaciones u otras afecciones que puedan estar causando los síntomas.
• Endoscopia para examinar el tracto gastrointestinal y descartar otras afecciones como úlceras o enfermedad inflamatoria intestinal.
• Estudios de imagen como la tomografía computarizada (TC) o la resonancia magnética (RM) para descartar otras afecciones y evaluar el estado del tracto gastrointestinal.
• Cuestionarios y escalas de evaluación que se utilizan para evaluar la gravedad del SII y su impacto en la calidad de vida del paciente, así como para evaluar la presencia de trastornos del ánimo como la ansiedad y la depresión.

Tratamiento

El tratamiento del SII y los trastornos del ánimo es complejo y requiere un enfoque multidisciplinario. En el caso del SII, se pueden utilizar diferentes estrategias, como cambios en la dieta, medicamentos o terapia. Por su parte, la ansiedad y la depresión también se pueden tratar con medicamentos y terapia psicológica.

Dieta

La dieta es un factor importante en el control de síntomas del síndrome de intestino irritable (SII) y de los trastornos del ánimo como la ansiedad y la depresión. A continuación, te presento algunas recomendaciones que pueden ayudar a mejorar tu situación:

1. Evita los alimentos procesados: son altos en grasas saturadas, azúcares refinados y aditivos alimentarios, los cuales empeoran los síntomas del SII y afectan negativamente el estado de ánimo.
2. Consume alimentos ricos en probióticos: los probióticos ayudan a mejorar la función intestinal y reducir la inflamación. Algunos alimentos ricos en probióticos incluyen yogur, kéfir, chucrut, kimchi y miso.
3. Aumenta la ingesta de ácidos grasos omega-3: ayudan a reducir la inflamación y mejorar la salud mental. Se encuentran en alimentos como el pescado graso (salmón, sardinas, arenque), semillas de chía, nueces y aceite de linaza.
4. Limita la cafeína y el alcohol: irritan el tracto gastrointestinal y empeoran los síntomas del SII. 
5. Aumenta la ingesta de agua y líquidos: la hidratación adecuada es importante para el buen funcionamiento del tracto gastrointestinal y para mantener el estado de ánimo equilibrado. 

Método AMA (alimentación consciente, mente-cuerpo y autoconocimiento)

Nuestro estilo de vida puede afectar a nuestra salud de muchas maneras. La alimentación y el estrés son dos factores clave que pueden tener un gran impacto en nuestra salud, tanto física como mental. Por eso, es importante prestar atención a las señales que nos envía el cuerpo y llevar un estilo de vida saludable para reducir los síntomas.

Si estás buscando una solución efectiva e integrativa, te presento el método AMA. Si lo aplicas de manera íntegra, verás resultados en solo 2 semanas, notarás efectos notables a las 4 y podrás alcanzar una recuperación en 12 semanas. 

¿Cómo se aplica? A través de las siguientes fases:

• Eliminación de los 5 venenos blancos.
• Retirada de los productos lácteos de origen animal vacuno.
• Dieta sin gluten.
• Combinación adecuada de alimentos para evitar la fermentación y la putrefacción intestinal.
• Eliminación de alimentos que alteran el sistema nervioso simpático (S.N.S.), como la cafeína, purinas, grasas no saludables y metales pesados.
• Limpiezas intestinales naturales.
• Limpieza hepática natural.

Además, es importante realizar otros tratamientos de forma transversal como la fitoterapia, la terapia psicosomática, ejercicios físicos específicos, la activación del nervio vago y la hipnoterapia clínica.

Si quieres mejorar tu salud de forma integral, el método AMA puede ser la solución que buscas. 

Conclusión

El SII es una afección gastrointestinal común que se puede relacionar con la ansiedad y la depresión. Aunque aún no se conoce con precisión la causa de esta relación, algunos estudios sugieren que factores como el estrés, la alteración de la microbiota intestinal o la alteración del eje cerebro-intestino están involucrados. Por lo tanto, es importante abordar de manera integral tanto el SII como los trastornos del ánimo para mejorar la calidad de vida de las personas que los padecen. 

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Fuentes consultadas:

• Cruz RMA, Ortíz HRB, Muñiz JD, et al. Asociación de depresión y ansiedad en pacientes con síndrome de intestino irritable. Rev Gastroenterol Mex. 2007;72(1):29-33.
• Vinaccia, S., Fernández, H., Amador, O., Tamayo, R. E., Vásquez, A., Contreras, F., Tobon, S., & Sandin, B.  (2005). Calidad De Vida, Ansiedad y Depresión en Pacientes con Diagnóstico de Síndrome de Colon Irritable. Terapia Psicológica, 23(2),65-74.[fecha de Consulta 20 de Abril de 2023]. ISSN: 0716-6184.